Anoche en antena3 emitieron el polémico reportaje de investigación “Franco: Operación Caídos”, en el que se desvelan detalles inéditos de la impresionante y desconocida operación puesta en marcha por el Gobierno franquista para llenar de cadáveres procedentes de la Guerra Civil el Valle de los Caídos.
Un reportaje presentado por Fernando González, Gonzo, quien presento también el pasado 17 de diciembre el reportaje de "Ángel Sanz Briz: El Schindler español". Pues bien el periodista Fernando González, Gonzo, ha investigado esta operación y ha encontrado una fotografía reveladora en la que varios trabajadores del Valle de los Caídos se encuentran dando sepultura a los cadáveres de Aldeaseca pocos días antes de la inauguración del monumento a los caídos. Precisamente la caja que el Juez Garzón buscaba, en la que se encuentran los restos de los siete republicanos cuya exhumación ordenó en El Valle de los Caídos. Una exhumación que luego paralizó la Audiencia Nacional.
Un reportaje en el que deja claro que Franco no respeto ni la voluntad de los familiares de su propio bando, ya que también hay sepultados en ese mausoleo restos de combatientes del bando nacional cuyas familias jamás dieron su permiso para que fueran exhumados de donde se encontraban y trasladados hasta el Valle de los Caídos.
Un reportaje presentado por Fernando González, Gonzo, quien presento también el pasado 17 de diciembre el reportaje de "Ángel Sanz Briz: El Schindler español". Pues bien el periodista Fernando González, Gonzo, ha investigado esta operación y ha encontrado una fotografía reveladora en la que varios trabajadores del Valle de los Caídos se encuentran dando sepultura a los cadáveres de Aldeaseca pocos días antes de la inauguración del monumento a los caídos. Precisamente la caja que el Juez Garzón buscaba, en la que se encuentran los restos de los siete republicanos cuya exhumación ordenó en El Valle de los Caídos. Una exhumación que luego paralizó la Audiencia Nacional.
Un reportaje en el que deja claro que Franco no respeto ni la voluntad de los familiares de su propio bando, ya que también hay sepultados en ese mausoleo restos de combatientes del bando nacional cuyas familias jamás dieron su permiso para que fueran exhumados de donde se encontraban y trasladados hasta el Valle de los Caídos.
Un reportaje en el que habla con varias personas que fueron las responsables de hacer las cajas, de los traslados y testigos de los entierros, en el que también entrevista al abad del monasterio, el padre Anselmo Álvarez, al que ha enseñado los archivos del Valle en los que constan anotados unos 33.497 cadáveres allí enterrados según los archivos del Valle de los Caídos y que según el propio abad considera que está a la baja, ya que él mismo estima que allí se encuentran los restos de muchísimas más personas, unas 60.000 personas. Además de que se dan a conocer varios errores, como es el caso de los fusilados de aldeaseca que eran siete y en el registro del valle los caídos consta como seis, error que probablemente se comete en el recuento al trasladar los restos, y como bien comprobarían años más tarde los familiares, que en 2003 deciden exhumar la fosa donde siempre habían creído que estaban los restos de sus familiares, para darles una digna sepultura, cuando se llevan la desagradable sorpresa que allí solo quedaban una calavera y varios huesos que se olvidaron en el traslado de restos al Valle de los Caídos, una profanación más de las que Franco llevo a cabo por toda españa.
Un reportaje muy interesante y que tendrá una segunda parte en la que habrá varios testimonios, entre los que se encuentra mi querido Andrés Iniesta “El niño de la prisión” y que además de los años sufridos en la cárcel, también se vio sometido a trabajar en Cuelgamuros como el se refiere siempre al Valle de los Caídos, del cual nos dejará su testimonio.
Una enorme fosa común con miles de restos humanos de toda España y de ambos bandos, un tráfico humano de restos profanados por orden del dictador y asesino Francisco Franco, cuya maldad y sufrimiento no deja descansar ni después de muertos, obligando a que sus victimas reposen junto a su verdugo, un ser egoísta que no respetó ni a sus propios brazos ejecutores, instaurando un pacto de silencio que cuesta romper aun después de 70 años, y dejando una enorme fosa común, España.
4 comentarios:
La megalomanía del dictador le llevó a la construcción de monumentos para su mayor gloria, como este del valle de Cuelgamuros. Y en su delirio no respetó siquiera la memoria de los suyos, utilizando los cadaveres de uno y otro bando.
Pero esto podía ser resarcido si hubiera una verdadera voluntad política de lleva adelante, con todas sus consecuencias la ley de Memoria Historica, pero la tibieza con que el gobierno está llevando este asunto impide que se devuelva la dignidad a todos aquellos que fueron pisoteados por la dictadura.
Salud, República y Socialismo
¡¡¡¡NO OLVIDEMOS!!!!
SIGUE MANTENIENDO LA LLAMA DE LA MEMORIA PARA QUE ASI NO VUELVA A OCURRIR LO MISMO.
GRACIAS
Si,he visto el reportaje.Interesante...
Hay hay gato encerrado,como todos sabemos.El problema es que yo creo que nunca se va a destapar la verdad,por desgracia....
Un saludo....
Aún nos intentan engañar con lo de que es "un monumento de reconciliación" cuando desde el primer momento estuvo claro que se construía a mayor gloria de los "muertos por Dios y por España", es decir, por ellos.Y encima fue construído por miles de presos republicanos en lo que fue un verdadero campo de trabajos forzados. Lo mejor que podría ocurrir es que un terremoto muy localizado derribara ese monumento al escarnio, que será siempre el símbolo de que todo sigue atado y bien atado.
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